Esta semana cosechamos las últimas naranjas valencia late y por fin los árboles descansan para poder seguir criando las naranjitas del año que viene, que ya tienen el tamaño de un huevo de codorniz.
Siempre que se acaba una campaña nos sentimos aliviados de ver el campo descargado y nos dan ganas de tomarnos unos días más relajados. Los valencia, sin embargo, no dan tregua. La cosecha que viene ya requiere de cuidados intensos: riegos, fertirrigación constante pero suave, vigilancia de plagas veraniegas.
Además esta semana asistí a una reunión de antiguos alumnos del Instituto San Telmo en Córdoba, que ya viene siendo tradición en las fechas que comienza a apretar el calor.
Espectacular charla del profesor Bartolomé Alarcón, de las que te ponen las pilas. Un profesor de escuela de negocios con experiencia profesional como para saber identificar las fortalezas y debilidades de un buen directivo. Nos dejó algunos dardos de los que no se olvidan y que te hacen levantarte al día siguiente con un buen impulso.
Como él nos dijo, las empresas tirarán para adelante si cada uno en su puesto de mayor o menor responsabilidad nos dedicamos con pasión a la regla de la triple A:
– Anticiparnos a los cambios que se puedan producir en nuestro entorno.
– Adaptar nuestro puesto de trabajo a esos cambios.
– Actuar con energía, conociendo cada vez mejor los entresijos de nuestro negocio.
Así que, lugar para la relajación, ninguna.
2 comentarios
preciosa foto,como se nota q sientes el campo.da alegria leer tus comentarios.ahora tengo poco tiempo pero de vez en cuando te veo por ahi.ahora solo hay tiempo para la campaña.un saludo.
Muchas gracias por tus cariñosas palabras. Hoy mismo he comprado en el super cerezas de mi querido Valle del Jerte. Deliciosas! Un saludo