Por fin le llegaron 50 litros a los almendros recién plantados. Con un poco de suerte no tenemos que regarlos más hasta la primavera. Más nos vale, ya que en la comunidades de regantes van a tener dificultades para darle largas al agua. Es una maravilla ver las plantitas del vivero con el cogollito verde esperando mejores temperaturas para seguir creciendo.
Una semana más estaremos mirando las nubes, a ver si se cumplen los pronósticos de lluvia, ya que nos toca meter las sembradoras de cereal en cuanto oree un poquito la tierra. Estamos en buenas fechas. El año pasado llovía tan intensamente estos días que salimos sembrando a boleo, por temor a no poder hacerlo con tranquilidad y después no volvió a caer una gota hasta abril. Cada año es un mundo, pero esta campaña nos iremos al método más seguro, que me da a mi que sembraremos tranquilamente.
Y entre lluvia y lluvia a seguir aprendiendo en las jornadas técnicas que se organizan. Esta semana tenemos el 25 aniversario del evento agrícola que organiza Antonio León en Sevilla, con todo su equipo. Y el jueves, convención de almendro en Écija. Para aprender, formarse, relacionarse y seguir en marcha. Y así contribuir a hacer de la agricultura moderna andaluza una de las mejores del mundo.