Creo que casi todos estamos de acuerdo con el espíritu de las nuevas normas que tenemos que cumplir los agricultores españoles a partir de enero.
– Que las ayudas PAC vayan a agricultores reales que cultivan la tierra.
– Que usemos racionalmente los productos fitosanitarios.
– Que exista una perfecta cadena para saber qué se le ha aplicado a las manzanas que se comerán mañana nuestros hijos.
En principio todo ideal. Pero, ¡ay! Me temo que en algo hemos fallado. Si nadie lo remedia, la actual normativa, de la que os dejo algunos enlaces para que veáis las decenas y decenas de condiciones que acarrea, todas obligatoriamente registrables en unos cuadernos de explotación infinitos, van a asfixiar de una manera insoportable a los agricultores. A los de verdad, a los de toda la vida, a los que hacen bien las cosas, a los que cultivan la tierra. Tanto es así, que puede que algunos agricultores ya mayores les dé por abandonar.
Y hay un run run generalizado en el sector, de que los agricultores españoles nos autocensuramos, mientras que las importaciones entran alegremente por nuestras fronteras y no se les pide el más mínimo cuaderno de explotación.
Que conste que los técnicos somos los más favorecidos, porque tendremos más trabajo, pero a tiempo estamos de corregir la norma, que para eso está, manteniendo el buen espíritu de la ley sin poner el pie en el pescuezo del buen agricultor.
2 comentarios
Visto el cuaderno NO CREO QUE LA FINALIDAD DE ESTE CUADERNO SEA LA TRAZABILIDAD.
SI EUROPA SIGUE ASI, CON TANTA BUROCRACIA COMO HA CREADO, NOS UNDIMOS,
¡Cuánta razón tienes, Ricardo! Por un lado a los agricultores comunitarios, en nuestro caso españoles, se les exige matrícula de honor, pero a los productores de terceros países (léase Turquía o Marruecos, por ejemplo) apenas se les exige un 5 raspado, y a veces ni eso.
Desde luego que muchos agricultores abandonarán porque estarán más agobiados por libros, registros y papeleos que por el cuidado de sus cultivos; pero que no quepa duda de que los que cumplirán con toda esa burocracia será los grandes terratenientes, cultiven o no la tierra, tendrán un amplío paquete de abogados y asesores para cumplimentar todos los impresos y recibir las ayudas que están hechas a su imagen y semejanza.
Vivimos en un país de burócratas, 17 reinos de taifas (comunidades autónomas) con su ejército de funcionarios, más las Diputaciones provinciales y sus respectivos séquitos de funcionarios, más los municipios, más las entidades menores, juntas locales,etc, ¿sigo? Vive mucha gente del cuento y de rellenar papeles. Y son pocos, y cada vez serán menos, los que se dediquen a una actividad real y productiva como la agricultura.